Por Silvio Pinto.- Volvo trae en esta ocasión a nuestro circuito de pruebas una versión “básica” de su FH460 Globetrotter XL, con elementos de seguridad que hace un par de décadas no estaban disponibles ni en opción. Esta prueba tiene un toque especial. Habitualmente los fabricantes aprovechan las pruebas de la prensa especializada para poner en valor todo su arsenal de opciones de equipamiento, de manera que el lector pueda, a través del “artículo” correspondiente, tener una idea del funcionamiento de tal o cual elemento, basada en la experiencia del probador de turno.
Este modus operandi tiene todo el sentido y la lógica del mundo, pero también, como contrapartida, ofrece en ocasiones una imagen bastante alejada del camión que se prevé comprar, y del que ya forma parte de la propia flota. En esta ocasión, Volvo Trucks ha querido romper esa máxima, que él mismo aplica con mano de hierro, con un vehículo que se caracteriza por su equipamiento básico, levemente
aderezado por algunos extras.
Ciertamente, Volvo ha demostrado con este test que la calidad de su producto es de serie, como lo son un buen número de elementos de seguridad. Ha demostrado que su “segunda” cabina de la familia FH conjuga un elevado volumen de espacio interior con unas dimensiones exteriores razonables. Y un servidor ha podido verificar, que el rendimiento de su variante de 460 cv sigue la magnífica estela dejada por sus hermanos mayores de 500 cv, con un equilibrio entre prestaciones y consumo no disponible, ni en opción, en algunos catálogos de la competencia.