El Ministerio de Fomento ha presentado a las asociaciones de transporte el Plan Nacional de Inspección para el transporte por carretera para el año 2017. Entre las conclusiones del plan destacan el crecimiento de la economía sumergida y competencia desleal, que hacen necesario reforzar las medidas de control para erradicar conductas anómalas.
Uno de los objetivos prioritarios en la inspección del transporte por carretera se centrará en el control del dumping social, como consecuencia del proceso de deslocalización de las grandes empresas de transporte hacia los países del Este de Europa. Esta actuación ya se ha venido desarrollando a lo largo de 2016, en colaboración con los cuerpos de inspección de otras administraciones públicas, aunque se espera instensificar en 2017, controlando tanto en carretera como a las empresas cargadoras.
Las actuaciones de control incluidas en el plan de inspección que se llevarán a cabo el próximo año son:
Control sobre la realización de servicios de transporte público, así como ofertar como intermediarios servicios de transporte en diferentes medios, sin estar amparados en la correspondiente autorización
Control del uso inadecuado de los tractores agrícolas para el transporte público de forma irregular, que representa una competencia desleal para el transporte por carretera
Control anual de los tiempos de conducción y descanso sobre la flota de 417.542 vehículos de transporte que están obligados a llevar tacógrafo. Por Ley, España está obligada a revisar, al menos, 2.818.409 jornadas de trabajo de los conductores profesionales, de las que la mitad se deberán controlar en la sede de las empresas y la otra mitad en carretera
Se hará un control especial sobre el posible uso fraudulento que se está llevando a cabo en el uso del certificado de actividades por parte de algunas empresas transportistas
Intensificación de los controles de las posibles manipulaciones en el tacógrafo o el limitador de velocidad en carretera. En el caso del tacógrafo, las manipulaciones que son detectadas corresponden a pequeños recorridos con velocidades muy cortas, por lo que se hará un mayor control en zonas como polígonos industriales y áreas metropolitanas de alto desarrollo industrial. Estas conductas no sólo son imputadas a la empresa transportista, sino también al conductor, sancionándose con multas de hasta 500 euros
Controles de exceso de peso de larga duración (dos), con la participación de la Administración del Estado y las comunidades autónomas
Control del transporte realizado por vehículos de menos de 3,5 toneladas de terceros países
Aumento de la inspección de los cursos de formación CAP, sobre todo en los de formación continua