Analizar la situación en la que se encuentra el transporte de mercancías por carretera, relativa a la seguridad de las personas y bienes, así como las responsabilidades de los diferentes actores, ha sido el objetivo de la jornada organizada por la Asociación Española Usuarios del Transporte de Mercancías (AEUTRANSMER).
Bajo el título “Impacto de la delincuencia en el transporte y la logística. Tendencias actuales”, prestigiosos ponentes han intentado dar con las claves de lo que está pasando en la actualidad en este sentido, poniendo encima de la mesa el por qué se ha llegado a esta situación, sus causas y las posibles soluciones que se pueden poner en práctica para revertir esta coyuntura.
El primero en intervenir ha sido Francisco de Santalla, Corporate Compliance del Grupo BODYBELL, que se ha referido al “Impacto de la delincuencia en la empresa”. A continuación ha tomado la palabra Eugenio Díaz, director de seguridad de Transportes AZKAR, quien ha analizado “Los principales actos antisociales que impactan en el transporte y la logística”.
Francisco José Alonso, inspector del Cuerpo Nacional de Policía-Unidad Central de Seguridad Privada, ha explicado cómo debería ser “la colaboración del CNP con la seguridad privada para la reducción del impacto delincuencial, haciendo hincapié en el control de calidad y las funciones del propio Cuerpo”.
Seguidamente, ha intervenido Jorge Salgueiro, presidente de la Asociación Europea de Profesionales para el conocimiento y regulación de actividades de Seguridad Ciudadana (AECRA), que se ha referido a los sistemas de seguridad para la reducción de robos y hurtos.
Por último, Gabriel Nieto, Alférez de la Unidad Técnica de la Policía Judicial, ha profundizado sobre la delincuencia organizada y las modalidades delictivas que afectan al transporte y la logística, haciendo mención a sus soluciones de orden interno.
En este sentido, Nieto ha alertado sobre el incremento que se ha producido en los dos últimos años de los robos a vehículos de transporte, pasando de los 300 en 2012 a los 500 en 2013 y 2014, un 66% más que entonces. Y ello sin tenerse en cuenta las sustracciones en cabina o de gasóleo y contabilizando únicamente los datos que maneja la Guardia Civil correspondientes a su radio de actuación. La mayoría de los mismos han tenido lugar en horario nocturno y en vehículos estacionados.
En cuanto al tipo de carga, Gabriel Nieto ha afirmado que “el sector de paquetería ha sido el más afectado, estando ello relacionado con el incremento de las ventas por Internet, lo que se ha traducido en un mayor número de robos en los núcleos urbanos”.