Del 13 al 19 de febrero, la Dirección General de Tráfico llevó a cabo una campaña de control a camiones y furgonetas para analizar múltiples variables. Los resultados acaban de salir a la luz, y han sido clarividentes: los agentes de tráfico han tramitado casi 2.000 denuncias en más de 67.000 controles a vehículos destinados a este tipo de transporte.
Durante la campaña de la DGT de control a camiones y furgonetas, las denuncias por exceso de horas de conducción y las relacionadas con el tacógrafo han sido las más numerosas. En concreto, los agentes de tráfico han tramitado un total de 1.963 denuncias por dichas cuestiones, 1.562 por no respetar los tiempos de conducción y descanso establecidos en la norma y 401 por cuestiones relacionadas con el tacógrafo digital.
El exceso de velocidad fue otra de las infracciones más frecuentes: en concreto, 1.725 conductores fueron sancionados por circular a una velocidad superior a la permitida: 90 kilómetros en el caso de los camiones. En cuanto al cinturón de seguridad, 434 conductores fueron denunciados por no estar haciendo uso de él en el momento del control.
Pese a los continuos mensajes de incompatibilidad de conducir bajo los efectos del alcohol y las drogas, 116 conductores fueron denunciados por ambos motivos: 61 de ellos por sobrepasar el límite de alcohol y 55 por hacerlo bajo la influencia de sustancias psicotrópicas.
Las denuncias sobre documentación relativas al vehículo y al conductor ascendieron a 2.463, mientras que las impuestas por exceso de peso o inseguridad de la carga fueron de 722. En la campaña llevada a cabo por la Dirección General de Tráfico han colaborado varios ayuntamientos que, a través de sus policías municipales, han intensificado los controles en los cascos urbanos de su competencia.