Desciende levemente el porcentaje de fallecidos en las carreteras españolas. Tras un verano negativo, en los últimos cuatro meses la siniestralidad descendió el pasado año un 9,5%, registrándose 40 fallecidos menos que en el mismo periodo del año anterior. En 2018, se produjeron 1.072 accidentes mortales en vías interurbanas, en los que fallecieron 1.180 personas y 4.515 heridas hospitalizadas, lo que supone un descenso en muertos y heridos graves.
La accidentalidad se ha producido en un escenario en el que los desplazamientos han aumentado un 2% (7,9 millones más), lo que supone que durante el pasado año se hicieron 416 millones de desplazamientos; el parque de vehículos creció un 3%, situándose en 33,7 millones de vehículo y el censo de conductores creció un 1%, con 26,8 millones en total.
El ministro del Interior, Fernando Grande Marlaska, ha dado a conocer el balance de accidentalidad vial 2018, quien lo ha definido como "un año irregular: el verano (considerando como tal los meses de julio y agosto), fue negativo, ya que fallecieron 256 personas, 31 más que en el verano del año anterior. Sin embargo, en los últimos cuatro meses del año, los fallecidos han bajado un 9,5%, 40 fallecidos menos que en el mismo periodo de 2017". Grande Marlaska ha afirmado que 2018 ha sido un año "de transición" en el que, después de dos años aumentando el número de fallecidos por accidente de tráfico, se ha conseguido frenar la siniestralidad.
En los últimos 10 años, el número de fallecidos en accidente de tráfico ha bajado un 46% (-1.000 fallecidos), pasando de los 2.180 en 2008 a los 1.180 en 2018. En ese mismo periodo, los desplazamientos de largo recorrido han aumentado un 5%, el parque de vehículos un 9% y el censo de conductores, un 13%.
Priorizar la seguridad vial política y socialmente
El presidente de la Fundación para la Seguridad Vial (Fesvial), Luis Montoro ha señalado que "para reducir los accidentes de tráfico (y, sobre todo, las víctimas), la seguridad vial debe tener una actuación prioritaria. La tendencia positiva que se produjo hace cinco años en las cifras de accidentes de tráfico provocó un negativo exceso de confianza y esto, junto con otros factores, trajo como consecuencia un repunte de la siniestralidad".
Desde Fesvial se apunta que los datos globales indican que el hecho de que la Dirección General de Tráfico haya establecido para 2019 cambios y medidas específicas en las normas de circulación ha permitido que la seguridad vial vuelva a situarse como una prioridad importante en la agenda política y, en consecuencia, que haya sido recogido en los medios de comunicación, generando un efecto positivo.
La fundación espera que "los cambios anunciados sobre las normas de circulación en 2019 permitan continuar con el descenso de fallecidos y heridos graves"